Abadía de Fossanova

Abbazia di Fossanova
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Abadia de Fossanova.jpg
Abadía de Fossanova
PatronoVirgen María
UbicaciónPriverno, Provincia de Latina Bandera de Italia Italia
Uso
CultoCatólica
DiócesisDiócesis de Latina-Terracina-Sezze-Priverno
OrdenOrden de San Benito, Orden del Císter y Orden de Frailes Menores
Arquitectura
Construcción1187-1208
Estilo arquitectónicoRománico y gótico cisterciense

La Abadía de Fossanova, antes llamada Fossa Nuova, es el ejemplo más fino de la arquitectura cisterciense en Italia, que supuso la introducción del gótico inicial de influencia borgoñona. La misma es similar a la Abadía de Casamari. Este complejo monástico cisterciense es uno de los más bellos de Italia y, desde 2006, la región del Lacio lo ha identificado como una excelencia del patrimonio arquitectónico, histórico y artístico, uno de los grandes atractivos culturales de la región. En este monasterio cisterciense murió Santo Tomás de Aquino.


Ubicación

Este monasterio se encuentra ubicado en la provincia de Latina, cerca de la estación de ferrocarril de Priverno, unos 100 kilómetros al sureste de Roma, en Italia.

Datos de interés

Su abadía madre era la Abadía de Hautecombe y sus abadías hijas eran Santo Stefano del Bosco (1192-1514), Marmosoglio (1167-1396), Corazzo (1173-1809), Ferraria (1179-1807) y Zannone (1246-1295).

Historia

Frente de la abadia de fossanova.jpg

El primer monasterio que se alzó en este lugar fue benedictino, sobre los restos de una villa romana, en el año 529, pero posteriormente en el año 1133, se entregó a los monjes cistercienses, quienes restauraron y reestructuraron la zona pantanosa al cavar un Foso Nuevo para el flujo de agua, este eficaz canal para drenar la zona le da nombre a la abadía. La abadía de Fossanova se construyó entre finales del siglo XII y principios del siglo XIII. Su iglesia es bastante similar a la Abadía de Casamari, y los otros edificios monásticos son también dignos de mención. La iglesia fue consagrada al Papa Innocenzo III el 10 de junio de 1208 y vivió un período de riqueza hasta mediados del siglo XV, cuando disminuyó lentamente hasta 1826, año en que Leo X lo confió nuevamente a una comunidad monástica.

Santo Tomás de Aquino la visitó estando enfermó y poco antes de morir, camino al Concilio de Lyons. El parador donde se albergó se convirtió en capilla en el siglo XVII. En los tiempos de Napoleón, la abadía cerró, pero fue comprada por el Papa León XII y con el tiempo se convirtió en una activa abadía franciscana, manteniéndose así hasta nuestros días.

Arquitectura

Interior de la abadia.jpg

Debido a su historia y arquitectura, sus visitantes son transportados a la Edad Media gracias a la iglesia de la abadía y su claustro, el museo medieval y los edificios antiguos que lo rodean, los cuales han sido renovados respetando los diseños y al mismo tiempo con toques de modernidad. El lugar presenta varias instalaciones de alojamiento: casas, restaurantes, bares, tiendas y un pequeño hotel para los momentos de descanso. La sobria iglesia gótica es cruciforme y de terminación cuadrada, similar a la de Casamari y la abadía de Císter. La iglesia está rodeada por un lado por el claustro, junto con el refectorio y la sala capitular y por el otro lado por el cementerio. La nave de Fossanova data de 1187.Todos edificios relacionados con la finca se encuentran esparcidos por el recinto amurallado. Contra fuertes se colocan contra las paredes, pero son pequeños y se parecen más a una pilastra clásica que a un contrafuerte volante. El monasterio tiene basados sus diseños en la original Abadía de Clairvaux y en algunos otros de Burgundy, en Francia. Al día de hoy es considerada el ejemplo de arquitectura gótica temprana más claro de Italia.

Características constructivas

Abadia fossanova construción.jpg

El complemento monumental de este monasterio se compone de la Iglesia, la Sala Capitular, el Convento, el Refectorio y el Claustro, que representa el centro del complejo. La iglesia, está dedicada a la Virgen María y Mártir San Esteban, representándose con sencillez desde la solemnidad y elegancia de formas, respetando la severidad de la regla cisterciense. Con una arquitectura solemne, sin adornos pictóricos de particular belleza es el elegante rosetón, que designa juego de luces de gran sugerencia en algunas horas del día y la gran nave central, marcada por potentes pilares y nervaduras. Además el claustro, se encuentra conectado a la iglesia "Puerta de los coristas", que es el verdadero punto de apoyo de la vida comunitaria del lugar. Los edificios más importantes de la abadía están unidos: refectorio, sala de reuniones de invierno, y la casa capitular usadas para caminar y meditar. De estilo románico y gótico, está diseñado por una doble serie de columnas de mármol emparejadas, diferentes entre sí.

Posteriormente está la espléndida sala capitular, adornada con columnas, una de las cuales está tallada con un nudo de Salomón o un Nudo Templario. Esta sala es considerada como la sede del estado mayor del monasterio. A lo largo del perímetro, se disponen los asientos de piedra en los que los frailes lidiaban con los problemas de teología y de interés económico, finalmente también se reunían para elegir al abad y a los demás superiores. El refectorio después de la iglesia es la sala más grande ya que era el área de reunión de todos los monjes que comían al mismo tiempo. Su techo de madera, está sostenido por cinco arcos apuntados; en las paredes de la derecha hay dos grandes arcos redondos, uno de los cuales es el púlpito en el que un monje, durante las comidas, leía a los hermanos los pasajes de las Sagradas Escrituras y del Padre.

En último lugar encontramos la enfermería y la casa de huéspedes que se encuentran a un lado de la abadía. La enfermería está aislada por la exigencia de impedir la propagación de las enfermedades contagiosas, y su arquitectura es similar a la del refectorio con arcos agudos y el techo de madera a la vista. La casa de huéspedes, por otro lado, se usó como alojamiento para peregrinos. En el primer piso se encuentra la celda que se remonta al último momento de Santo Tomás, que hoy alberga el museo medieval. Su plazoleta empedrada es uno de los mejores espacios para ver el exterior del lugar donde se observa toda la fachada de color claro y el rosetón. Los claustros del monasterio están rodeados de exuberantes jardines con vistas espectaculares de la torre de la iglesia. Las paredes y columnas no están muy decorados respetando los patrones de los valores cistercienses, aunque se visualizan algunas esculturas en las bases de algunas de ellas, además de algunas pinturas al aire fresco que se han ido desvaneciendo.

Véase también

Fuentes