Hijos de la anarquía

Sons of Anarchy
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Jackson Teller (Charlie Hunnan), hijo del líder difunto de la banda encuentra unos diarios donde su padre describe los orígenes de la banda y la traición a sus principios.
Características Generales:
Creador de la historieta:Kurt Sutter
Género:Drama
Versión para televisión:
Episodios:39

Sons of anarchy. Es la apuesta segura para todo quien extraña el surrealismo gangsteril de Los Soprano y que echará de menos las luchas por el poder que rebasaban al bien y al mal en The Shield

Introducción

La serie sigue de cerca a Jackson Teller (Charlie Hunnan), hijo del líder difunto de la banda, e hijastro de Perlman, quien a la partida del rey original se hizo con corona y mujer del fallecido. Jackson encuentra unos diarios donde su padre describe los orígenes de la banda y la traición a sus principios. ¿Estas reflexiones tuvieron que ver con su muerte no deel todo explicada? Su madre Gemma (una enorme y bellísima y letal Katey Segal en su papel de Lady Macbeth) se niega a darle respuestas. Violenta y despojada, pero con un hálito shakespereano en su trama y sus diálogos, Son of Anarchy es la apuesta segura para todo quien extraña el surrealismo gangsteril de Los Soprano y que echará de menos las luchas por el poder que rebasaban al bien y al mal en The Shield.

Principales personajes

Universo de "Sons of Anarchy": La Hermandad Aria y los Ángeles del Infierno

Los guionistas han ‘bebido’ del universo de las bandas de motoristas de los años 60 y 70, destacando las similitudes de los ‘Hijos de la Anarquía’ con los ‘Ángeles del Infierno’, banda mítica californiana, conocida por sus continuos desmanes y sus relaciones con famosos artistas de Hollywood y del mundo de la música. Por otro lado, otra famosa organización está reflejada en la serie: la llamada ‘Hermandad Aria’, banda organizada y muy violenta, con un poder enorme dentro de las cárceles norteamericanas, la cual nació en la década de 1950, y cuyo germen fue una banda de moteros irlandeses al igual que los integrantes de Son of Anarchy- que entraron en prisión por diversos delitos. Su símbolo es el trébol, un tatuaje con simbología claramente irlandesa, y la svástica.

El drama shakesperiano de los Hijos de la Anarquía

Jackson Teller (Charlie Hunnan), hijo del fundador ya fallecido de la banda e hijastro del jefe actual, Clay Morrow (Ron Perlman), descubre los diarios ocultos de su padre, en los que éste ya comenzaba a criticar la espiral de ilegalidad y violencia en la que se había convertido la banda. Las dudas comienzan a surgir en la cabeza de Jackson Teller e intenta ‘legalizar’ la situación de la banda. Pero su madre, Gemma Morrow (Katey Sagal) y su actual padrastro y presidente de Sons of Anarchy, Clay Morrow (Ron Perlman), en un principio se muestran contrarios a la idea, sobre todo cuando el negocio va viento en popa.

Tercera temporada y cuarta temporada de "Sons of Anarchy"

En la tercera temporada de ‘Hijos de la Anarquía’ hay caras nuevas como Paula Malcolmson, conocida por su papel de Amanda Graystoneen Caprica, que interpreta a Maureen, personaje con enorme peso en esta nueva temporada. También se rumorea con la breve aparición del escritor Stephen King en uno de los capítulos, algo aún no confirmado por el entorno de la serie, ni del propio escritor. En la esperada tercera temporada podremos ver cómo finaliza la trama del secuestro del pequeño Abel. Asimismo, podremos seguir las andanzas de Gemma (Katia Segal), que huye de la justicia por el asesinato de Polly, la hija de Zobelle. Nuevas caras y nuevas tramas para una de las bandas más entrañables y a la vez más violentas de la televisión.

Sus números han sido la gran revelación de la temporada estadounidense, los críticos han mentado una y otra vez a Shakespeare y a Los Soprano y su reparto es considerado el más sólido y potente de toda la parrilla estadounidense. Hasta Víctor Valdés, Pedro, Silva o Sergio Busquets, futbolistas e internacionales absolutos con la Roja han declarado su pasión por ellos. Sin embargo Hijos de la anarquía no acaban de encontrar su hueco en el Olimpo de las series televisivas. "No quiero hacer un show que todo el mundo mire. Nos hemos dado cuenta de que no importa lo bueno que sea: por la violencia y el tono de la serie nunca vamos a conseguir saltar al siguiente nivel" declaraba hace unos meses Kurt Sutter, el cerebro del asunto, al periódico Wall Street Journal.

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Sutter ya demostró contundencia con su anterior trabajo, The Shield , en el que enlazó -capítulo tras capítulo- algunos de los momentos más brutales que ha dado la caja tonta en los últimos años y cuya última temporada (la séptima), dirigida en su mayoría por Clark Johnson (The wire ), rivaliza con cualquier otra serie habida y por haber. Precisamente fue al final de The Shield , en 2008, cuando Sutter decidió que quería hacer algo distinto y que los Ángeles del Infierno podían ser un buen sujeto para su siguiente trabajo. Así fue como el guionista se pasó varios meses en el sur de California empotrado en un club de motoristas cuyas actividades -según admitía el propio Sutter- iban más allá de sus trabajos diurnos. De allí salió Hijos de la anarquía, una serie que acontece en un pueblecito ficticio enclavado en el Valle de San Joaquín (California) llamado Charming y que cuenta la historia -con tintes vodevilescos- de un grupo de Ángeles del Infierno, comandados por Clay Morrow, un personaje memorable, a medio camino entre Tony Soprano y el Rey Arturo, al que da vida Ron Perlman.

Para Perlman el éxito de Hijos de la anarquía y el hecho de que la serie haya doblado su audiencia entre la primera y segunda temporada (incluso la ha triplicado en targets tan sabrosos como la de los espectadores cuya franja de edad va de los 34 hasta los 50) se debe especialmente a un factor: "¡Porque es Hamlet tío!. El rey está muerto y la pelea por el trono se abre, así que además de la tensión propia de vivir en un mundo sin leyes, violento e impredecible se habla de la legitimidad del rey y de su reino y que es lo correcto y lo equivocado. Es un muro de tensión y caos que parece gustar a la audiencia".

Puede que Hijos de la anarquía (el nombre de guerra del motoclub) no hayan conquistado al gran nicho de la audiencia generalista pero lo que si han conseguido es que los críticos hayan alzado la ceja, entronándola como la heredera (certera y cercana) de las aventuras de Tony Soprano y su prole. El código ético de los motoras, más cercano al medievo y a la edad de hierro que al s.XXI; su particular reinterpretación del término "intriga palaciega" y la brillantez en el uso del secretismo como ventilador narrativo colocan la serie en un lugar muy alejado del gusto genérico. Sin embargo, tras su obvia vocación de serie de culto se esconde un producto adulto, algunas veces alocado, con continuas bofetadas al espectador (en forma de episodios en los que los personajes son maltratados sin discriminación de raza, religión, edad o sexo) y con una reina inesperada: la actriz Katey Sagal.

En España Hijos de la anarquía volverán la próxima semana -de lunes a viernes, 23.55) a la parrilla de Fox Crime (Dial 19 de Digital +) con la reemisión de sus dos primeras temporadas. Para su esperadísima tercera entrega (solo hay que ver el desenlace de la segunda para entender por qué) habrá que esperar un poco más. También arrancará de cero en Antena 3, aún sin fecha de emisión. Mientras tanto, los aficionados a las motos en su vertiente más purista (para entendernos, los fans de las Harley & Davidson, factoría que ha apoyado el proyecto desde sus inicios) ya tienen algo que les alegra la vista. "Sí, es un culebrón pero es nuestro culebrón" se repite en los foros dedicados a la serie. De momento, y como dice la canción de Curtis Stigers & The forest Rangers que se ha convertido en el himno de Hijos de la anarquía: "la vida es corta, es un hecho cariño. Vívela bien, porque no vas a volver".

Y es que si en aquella encontró la gloria un James Gandolfini que hasta entonces había estado relegado a papeles de matón secundario, en Sons of Anarchy brilla Ron Perlman (Hellboy sin maquillaje) como el soberano de un pequeño pueblo donde su banda de moteros, los Hijos de la Anarquia (suerte de Hell Angels 30 años después) imponen el orden y la ley para gozar de terreno libre para sus propios negocios: tráfico, juego y protección. La serie sigue de cerca a Jackson Teller (Charlie Hunnan), hijo del líder difunto de la banda, e hijastro de Perlman, quien a la partida del rey original se hizo con corona y mujer del fallecido. Jackson encuentra unos diarios donde su padre describe los orígenes de la banda y la traición a sus principios. ¿Estas reflexiones tuvieron que ver con su muerte no deel todo explicada? Su madre Gemma (una enorme y bellísima y letal Katey Segal en su papel de Lady Macbeth) se niega a darle respuestas. Violenta y despojada, pero con un hálito shakespereano en su trama y sus diálogos, Son of Anarchy es la apuesta segura para todo quien extraña el surrealismo gangsteril de Los Soprano y que echará de menos las luchas por el poder que rebasaban al bien y al mal en The Shield.

Fuentes