Infección crónica por el virus de la hepatitis C

Infección crónica por el virus de la hepatitis C
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Infección crónica por el virus de la hepatitis C, originada por la enfermedad del mismo nombre.

Introducción

La hepatitis C es una enfermedad del hígado causada por el virus del mismo nombre; ese virus puede causar hepatitis, tanto aguda como crónica, cuya gravedad varía entre una dolencia leve que dura algunas semanas, y una enfermedad grave de por vida.

Generalidades

• El virus de la hepatitis C (HCV) es un virus ARN, de la familia Flaviridae, del género Hepacivirus. • Entre el 55-85% desarrolla una infección crónica, con un riesgo de progresión a cirrosis de 5-25% a 25 años. En pacientes cirróticos el riesgo de desarrollar un hepatocarcinoma (HCC) es de 3-5% por año. • Los pacientes que se presentan como una hepatitis aguda sintomática tienen mayores posibilidades de hacer un clearence espontáneo, en relación a las formas asintomáticas, como así también el sexo femenino, con una tasa de resolución espontanea del 40%. • La infección crónica por HCV es la principal causa de muerte por enfermedad hepática y la etiología más frecuente que conduce al trasplante hepático en Estados Unidos. • El tratamiento puede evitar o disminuir la progresión a una enfermedad hepática avanzada, incluyendo la cirrosis y el hepatocarcinoma.

Epidemiología

• Se estima que el 3% de la población mundial está infectada por el virus, con 130 a 170 millones de casos, 3 a 4 millones de casos nuevos al año y 13 millones de casos en América. • En nuestro país, la prevalencia de anticuerpos contra el virus C (Anti-HCV) en la población general se estima cercana al 2% (baja endemicidad). • La prevalencia en drogadictos endovenosos (DIV) es mayor al 50%. • Se estima que la mortalidad relacionada al HCV (por insuficiencia hepática y HCC) continuará en ascenso en las siguientes dos décadas. • Se recomienda realizar investigación del HCV en aquellas personas nacidas entre los años 1945 - 1965.

Vías de transmisión

• La vía parenteral es la más frecuente. Incluye el uso de drogas EV o nasales, accidentes laborales con elementos punzo-cortantes, transfusiones de sangre o hemoderivados (antes de 1987), trasplante de órganos sólidos o médula ósea (antes de 1992). No se trasmite por leche materna. • La vía sexual y perinatal es poco efectiva (mayor riesgo en HIV y hombres que tienen sexo con hombres promiscuos.

Manifestaciones clínicas

Hepatitis aguda: en el 20-25% de los casos. Las formas sintomáticas tienen más posibilidades de resolución y clearence viral espontáneo (mayor en niños, mujeres jóvenes, genotipo viral G2, 3). Asintomática en el 70-80% de los casos, la forma ictérica aparece en el 20% restante. Pueden presentar síntomas inespecíficos como fiebre, adinamia, mialgias, hiporexia, náuseas, vómitos y prurito. • Hepatitis severa y fulminante: es infrecuente, y si bien existen casos reportados, algunos discuten esta forma de presentación. • Hepatitis crónica: en aproximadamente un 80% de los casos. Hasta un 30% desarrolla cirrosis en un tiempo medio de 30 años, por ello es fundamental conocer la fecha probable de infección para determinar el tipo de convivencia entre el huésped y el virusy la posible evolución. Factores que favorecen la progresión en la infección crónica por HCV: o Demográficos: edad >40 años, sexo masculino o Toxinas: alcohol, tabaco y marihuana o Coinfección HBV o Inmunosupresión: coinfección HIV, postrasplante o Metabólicos: esteatosis, insulino resistencia, sobrecarga de hierro o Genéticos: polimorfismos IL-B28 (polimorfismos CT y TT) • Hepatocarcinoma: 3 - 4% anual en pacientes cirróticos.

Pruebas diagnósticas

• Pruebas serológicas (Acs Anti-HCV) detección de anticuerpos para el HCV por ELISA. Indican infección pasada o en curso. Se desarrollan de 1 a 6 meses luego de la infección. Pueden estar ausentes en inmunodeprimidos. Se utilizan como método de screening (DIV actuales o pasados, HIV, antecedentes de transfusiones o trasplantados, hijos de madres con HCV, parejas de pacientes con HCV, personal de salud) y como método diagnóstico. También se puede utilizar el método RIBA/LIA, test suplementario al ELISA que permite caracterizar los antígenos virales específicos contra los cuales están dirigidos los anticuerpos existentes detectados en el ELISA. Sólo tiene utilidad para confirmar un resultado con baja Rp (relación de positividad) o resultados discordantes ELISA (+), PCR cualitativa (-). Un resultado negativo indica falso positivo del ELISA; un resultado positivo con dos determinaciones de PCR cualitativas negativas indica infección resuelta.

Tratamiento

La hepatitis C se trata con medicamentos antivirales, los que pueden curar la enfermedad en la mayoría de los casos. Si tiene hepatitis C aguda, su profesional de la salud puede esperar a ver si su infección se vuelve crónica antes de comenzar el tratamiento.

Si su hepatitis C causa cirrosis, debe consultar a un médico especializado en enfermedades hepáticas. Los tratamientos para problemas de salud relacionados con la cirrosis incluyen medicamentos, cirugía y otros procedimientos médicos. Si su hepatitis C provoca insuficiencia hepática o cáncer de hígado, es posible que necesite un trasplante de hígado.


Fuente

05-11-2019