Josefina Rivera de Álvarez
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Josefina Rivera de Álvarez. Educadora, ensayista, investigadora e historiógrafa de las letras puertorriqueñas.
Síntesis biográfica
Nació el 29 de agosto de 1923 en Mayagüez, fueron sus padres José G. Rivera Olán y María Luisa Rivera Custores, cursó las enseñanzas primaria y secundaria en escuelas de esta localidad.
Trayectoria
En 1945 se graduó de Bachiller en Artes Liberales en el Instituto Politécnico de Puerto Rico, actual Recinto San Germán de la Universidad Interamericana. Obtuvo una Maestría en Artes con especialización en Estudios Hispánicos en la Universidad de Columbia, Nueva York en 1947, lo que le posibilitó practicar la docencia. En 1954, se doctoró en Filosofía y Letras en la Universidad Central de Madrid con una tesis que fue la primera versión del Diccionario de Literatura Puertorriqueña.
Entre los años 1945 y 1946, aún en su época de estudiante, trabajó como maestra en la Escuela Pública José de Diego y en la Escuela Superior Eugenio María de Hostos, ambas en su ciudad natal. Al finalizar su Maestría, ingresó al Departamento de Estudios Hispánicos del Recinto Universitario de Mayagüez de la Universidad de Puerto Rico. En esta institución practicó la pedagogía durante cuarenta años, inicialmente como instructora y luego como catedrática. Impartió clases en las materias Literatura Puertorriqueña, Literatura Hispanoamericana, Romanticismo y Modernismo en Puerto Rico, Español Básico, La Generación del 30, La Generación del 45, entre otras.
Desde 1956 fue miembro de número de la Academia Puertorriqueña de la Historia de San Juan, además de ser miembro electo de la Academia Puertorriqueña de la Lengua. Solo un año antes había publicado su primera obra: Diccionario de Literatura Puertorriqueña, cuya información revisó y amplió Rivera de Álvarez en una nueva edición de 1974 en dos tomos. A partir de 1966 fue miembro de número de la Academia de Artes y Ciencias de Puerto Rico. Tres años más tarde vio la luz la publicación Historia de la Literatura Puertorriqueña, por la Editorial del Departamento de Instrucción Pública del Estado Libre Asociado de Puerto Rico. Asimismo, Literatura Puertorriqueña. Su proceso en el tiempo, con una primera edición en 1983, se convirtió en un texto de consulta para el análisis de la literatura insular. Estos tres libros constituyen una selección y recopilación de la mejor tradición literaria boricua y la mayor contribución de la destacada pedagoga a la historiografía de las letras latinoamericanas.
También fue miembro de prestigiosos centros de investigación humanística a nivel internacional: miembro correspondiente de la Academia de la Historia de Madrid (1981), de la Academia de Geografía e Historia de Guatemala (1982), de la Academia Nacional de la Historia de Venezuela (1987) y de la Academia Dominicana de la Historia (1988).
Rivera de Álvarez contrajo matrimonio con un fundador del Departamento de Estudios Hispánicos del Recinto Universitario de Mayagüez, el lingüista y filólogo Manuel Álvarez Nazario, con quien emprendió diversos proyectos que tienen trascendencia enciclopédica en términos de referencias sobre las letras hispanoamericanas. Ejemplo de ello es el volumen Antología general de la literatura puertorriqueña. Prosa-verso-teatro, de 1982.
Su obra
Dedicó especial atención al estudio del cultivo de los géneros literarios nacionales, como el cuento folklórico, la novela, el teatro, la oratoria, la dramaturgia. Su producción ensayística abarca publicaciones sobre personalidades y acontecimientos relevantes del ámbito cultural, sobre todo los vinculados a América Latina. De esta manera contribuyó con revistas de alcance académico, como Atenea (Mayagüez), Asomante, Revista del Instituto de Cultura Puertorriqueño, Revista del Ateneo Puertorriqueño, Revista del Centro de Estudios Avanzados de Puerto Rico y el Caribe, entre otros, y periódicos nacionales, como El Nuevo Día y El Mundo y extranjeros, como La Prensa (Nueva York) y La Nación (Argentina). Entre sus ensayos más reconocidos se encuentran “El aguinaldo puertorriqueño de 1843”, en la revista Atenea del Recinto de Mayagüez y “El cuento folklórico en Puerto Rico”, en la Revista del Instituto de Cultura Puertorriqueña.
Por su prolífica trayectoria profesional recibió una cantidad considerable de homenajes por parte de instituciones culturales, universidades locales y centros cívicos. Dos de sus primeros textos, el Diccionario de Literatura Puertorriqueña e Historia de la Literatura Puertorriqueña, le valieron el Premio de Literatura del Instituto de Literatura Puertorriqueña en los años 1969 y 1974. Del Recinto Universitario de Mayagüez recibió en 1975 un reconocimiento por el Año Internacional de la Mujer.
Reconocimientos
Hacia 1976, en esta misma entidad, fue seleccionada Maestra Ejemplar por sus compañeros del Departamento de Estudios Hispánicos y la Facultad de Artes y Ciencias le otorgó un Agradecimiento Institucional. En 1984 el Club Altrusa de Mayagüez la nombró Educadora y Escritora de grandes méritos. Tres años después el Comité Ejecutivo del Segundo Congreso de Creación Femenina le rindió homenaje debido a su destacada labor en el quehacer académico y la crítica literaria en su país.
Por otra parte, en 1989 la Academia de Artes y Ciencias de Puerto Rico le entregó el Gran Premio Puertorriqueño en Investigación Literaria. La Universidad de Puerto Rico le concedió la distinción de Profesora Emérita en los Actos de Coalición de Grados de 1991 y dos años más tarde recibió junto a su esposo la medalla “Humanista del Año” que les confirió la Fundación Puertorriqueña de las Humanidades durante un acto de reconocimiento a su labor. El Instituto de Cultura Puertorriqueña le confirió el Premio Nacional de Cultura correspondiente al año 2000 y para el 2006 obtuvo el Premio Pen Club.
Igualmente participó en varias ocasiones en planes filológicos de orden internacional, como parte de embajadas representantes de Puerto Rico. De esta manera fue asesora del proyecto del Diccionario de la Literatura Latinoamericana, de Unión Panamericana; miembro en el Comité Asesor de la Revista de Bibliografía Latinoamericana, del mismo organismo, y miembro de la Comisión de Monumentos del Instituto de Cultura Puertorriqueña.
Sus aportes al trabajo literario regional vieron su cumbre en 1995, cuando ella y el Doctor Mariano Álvarez Nazario donaron su colección de libros y documentos al Recinto Universitario de Mayagüez. La Colección Josefina y Manuel Álvarez Nazario, como fuera llamada, se inauguró oficialmente en 1997 y cuenta con alrededor de cinco mil títulos, ejemplares raros, copias autografiadas, dos mil piezas de revistas y periódicos, que el matrimonio de lingüistas fue adquiriendo a lo largo de su labor investigativa y docente. Además, en ella se encuentran los reconocimientos que recibieron durante su vida académica e intelectual.
Fallece
Josefina Rivera de Álvarez falleció el 29 de junio de 2010, a los 86 años de edad.
Fuentes
- Artículo disponible en: Josefina Rivera de Álvarez.
- Artículo disponible en: Josefina Rivera.
