Moliobka

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Moliobka
Молёбка
  [maliébka]
Información sobre la plantilla
Selo (aldea rural)
EntidadSelo (aldea rural)
 • Krai (región)Perm
 • DistritoKishertsky[1]
 • Selo (aldea rural)Moliobka
Población 
 • Total374 hab.
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Moliobka (en letra cirílica del idioma ruso: Молёбка) es una “selo” (‘aldea rural’) ubicada en el distrito de Kishertsky, dentro de la región (krai) de Perm, en el suroccidente de Rusia, el país más grande del mundo.

En 2002 tenía 374 habitantes.

Se encuentra a 167 km al sureste de la ciudad de Perm (la capital de la región), y a 329 km al oeste de la ciudad de Ekaterimburgo.

Está ubicada en la orilla del río Sylva en su confluencia con el río Molyobka.

Sus coordenadas geográficas son:

  • 57° 14′ 05″ N
  • 57° 55′ 56″ E

A 84 km al noroeste se encuentra una aldea de 44 personas llamada Moliobka.[2]

Historia

En esta zona, en la antigüedad, los chamanes del pueblo mansi realizaban sacrificios humanos para apaciguar a sus dioses.

La historia del pueblo comenzó en 1787, cuando el magnate ruso Demidov creó a orillas del río Maliobka la fábrica de hierro fundido Maliobka. La fábrica estuvo activa hasta que en 1904 el agotamiento de las minas locales de hierro provocó su cierre. Sin embargo, durante la Guerra Civil Rusa se libró una cruenta batalla por la fábrica.[3]

En los años 1930, los campesinos contaban sobre desaparición de personas y luces en la noche y pérdida de la orientación (incluso cazadores experimentados durante semanas no podían encontrar la salida de la región).[3]

En los años 1980, Malyobka ganó fama entre los buscadores de ovnis debido a presuntas actividades paranormales que tenían lugar en el llamado “triángulo de Maliobka”.[3]

Emil F. Bachurin, un escritor sensacionalista de Perm, afirmó que en octubre de 1984 encontró en la nieve una huella en forma circular de un diámetro de 62 metros. Difundió historias sobre la presencia de un yeti (hombre de las nieves), platillos voladores y plasmoides (esferas brillantes). También afirmó que mediante radiestesia habría demostrado la presencia de fuertes anomalías y radiaciones.[4]

Desarrollo económico

Turismo

El municipio local tomó muy en serio el desarrollo turístico del “triángulo M” ya que cada año este lugar es visitado por varios miles de turistas.

Si continúa esta fiebre turística, en los años 2020 se construirá un museo de ovnis, con un “observatorio” en forma de un platillo volador.

Hasta 2010, los autobuses turísticos no podían llegar al pueblo, pero ahora en la carretera federal Perm-Ekaterinburgo, a 70 kilómetros de Maliobka apareció una señalización que representa un platillo volador. Este es una señalización que ayuda a los interesados en las civilizaciones extraterrestres no perder el camino.

La señalización ha sido el comienzo de refinación de las zonas turísticas cercanas a Maliobka. Esta primavera la administración del distrito decidió que el pueblo necesitaba un monumento al alien ruso, para su fabricación el presupuesto asignó un monto impresionante de 45 000 rublos (1500 dólares).[5]

Estatua de un extraterrestre en madera

Un “alien” de madera fue hecho por un artesano local Víktor Sazanov. El municipio ya le asignó los mismos 45 000 rublos. Sin embargo, el autor del monumento tiene la intención de añadir sus propios fondos al proyecto para que la creación fuera "más monumental y más atractiva". Está previsto que el monumento se hará de madera de pino. Varias obras de este escultor, ídolos de madera, ya adornan la entrada a la zona anómala.[6]

Además para que sea más fácil para los turistas de llegar al lugar del posible desembarco de los aliens, en las orillas del río Sylva se van a instalar los muelles para los barcos.[7]

El último vuelo de los ovnis se registró en Molebka en mayo y julio de 2017. Nuestro pueblo es el único en el mundo donde los ovnis hacen vuelos regulares. Por eso decidimos erigir un monumento a sus pilotos
Víktor Medvedev, jefe del Departamento de Desarrollo
Empresarial, Comercio y Turismo del municipio local

Miles de turistas procedentes de Rusia y del extranjero viajan a la zona anómala de Molebka anualmente.[8]

En la aldea no hay hoteles, por lo que los visitantes ―que vienen exclusivamente en primavera y verano― deben dormir en tiendas de campaña.

Festival turístico ovni

En julio de cada año se realiza en este pueblo el festival Verdadero y Falso en el Triángulo de Molyobka.

El festival incluye

  • una competencia de diseño y construcción de “círculos en los cultivos”,
  • un concierto de música “espacial”.
  • una conferencia de ufólogos (“expertos”) en ovnis.

Los ufólogos afirman ―sin aportar ninguna evidencia a sus dichos― que los científicos rusos “confirmaron” que un lago extraño hueco que se encuentra en esta zona, que antes se pensaba que era un lago, era en verdad la huella que dejó un ovni después de un duro choque contra nuestro planeta. También afirman que hasta el día de hoy ese enorme lago está siendo “analizado” por científicos e importantes instituciones secretas de todas las potencias mundiales...

Debido a que estas investigaciones serían totalmente confidenciales, los habitantes locales crearon un recorrido turístico por la zona, denominado Festival del Triángulo de Maliobka.[9]

Las familias que viven en esta zona no logran avistar ningún fenómeno paranormal. Solo los guías turísticos y algunos turistas afirman que su viaje y el dinero invertido no fue en vano, porque pudieron avistar ovnis e incluso entrar en contacto verbal y telepático con los extraterrestres.[10]

Según ufólogos y estafadores, los extraterrestres vienen a la Tierra desde los años 1940 pero no se dejan avistar, salvo por personas con problemas psiquiátricos o mitómanos (mentirosos compulsivos).

Si personas de otros planetas visitaran la Tierra, se puede suponer que tendrían dos tipos de actitudes:

  • no dejarse avistar por nadie (tendrían la tecnología para evitar encender luces multicolores giratorias que llamarían la atención)
  • darse a conocer a toda la humanidad.

No tendría sentido que los extraterrestres se hicieran ver en zonas rurales donde prácticamente no hay población humana.

Fuentes