Parque Nacional Fiordland
| Parque Nacional Fiordland, Nueva Zelanda | |
|---|---|
  Nombre descrito en la Lista del Patrimonio de la Humanidad. | |
 | |
| Coordenadas | 45°25′00″S 167°43′01″E |
| País | Nueva Zelanda |
| Tipo | Natural |
| Criterios | (vii)(viii)(ix)(x) |
| N.° identificación | 551 |
| Región | Oceania Asia |
| Año de inscripción | 1990 (XIV sesión) |
El Parque Nacional Fiordland se extiende a lo largo de la costa suroeste de Nueva Zelanda, representa el país en su forma más fotogénica: montañas irregulares, valles glaciares escarpados y fiordos relucientes. Este sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO alberga algunas de las maravillas naturales más impresionantes de Nueva Zelanda, como Milford Sound, Doubtful Sound y el lago Te Anau, así como raros pingüinos, delfines, focas y leones marinos de Fiordland.
Sumario
Historia
Nueva Zelanda es un país formado por dos grandes islas que poseen una enorme cantidad de asombrosos paisajes naturales. Allí existen 14 parques nacionales, el más grande de ellos es el Parque Nacional Fiordland, con un área de 12.500 km2 está geográficamente beneficiado de forma natural por su particular ubicación a nivel global, lo que distingue a este país y lo ubica como uno de los destinos favoritos de los alpinistas y caminantes más exigentes.
Situado en la Isla Sur de Nueva Zelanda, en la parte suroeste de la misma, el Parque Nacional Fiordland es el más extenso del país, y también una visita obligada para el viajero. Los catorce fiordos que componen Fiordland se formaron con el deshielo de la última glaciación en la cordillera de los Alpes del Sur.
Montañas de más de dos mil metros y canales que se entrecruzan entre las cascadas originadas en los glaciares forman un paisaje único en el mundo. El agua dulce de dichas cascadas provoca que los corales estén cerca de la superficie del mar, creando una de las más bonitas imágenes de Fiordland.
La zona de glaciares y fiordos situada en la zona meridional de Isla Sur de Nueva Zelanda se denomina Milford Sounds y es destino de miles de viajeros y curiosos que se acercan desde todas partes del mundo, año tras año para visitar esta imponente maravilla natural.
Tiene un clima templado, muchas horas de sol y precipitaciones moderadamente altas, y dado que las áreas alpinas del interior de la Isla Sur pueden llegar a los 10º C (14º F) en invierno, es recomendado ir a Fiordland entre Noviembre y Marzo, en estos meses las temperaturas son suaves y los turistas podrán disfrutar de una mayor visibilidad y adaptabilidad al microclima de la isla.
No importa qué grado de experiencia poseas en hiking, si eres apasionado por las caminatas de montaña debes visitar Milford Sounds, ya que este área ofrece rutas cortas y largas para amantes de la montaña de todos los niveles.
La Isla Sur presenta gran cantidad de fiordos, estas manifestaciones naturales caracterizan a Nueva Zelanda y la hacen un lugar único en la tierra, considerado por muchos por ser un verdadero paraíso.
Las inmensas distancias, las cuevas laberínticas, los limpios lagos y las imponentes montañas de la Tierra Media fueron descritas por el escritor J. R. R. Tolkien en su novela “El Señor de los Anillos” a mitad del siglo XX.
Puntos destacados
Un fiordo se define como un valle en forma de U, creado por acción de un glaciar, que fue inundado por el mar. Los 14 fiordos que bordean la esquina sudoeste de la Isla Sur tardaron 100.000 años en formarse y los detalles finales se agregaron durante la edad de hielo más reciente, hace solo [[10.000 años]. Los maoríes atribuyen la creación de los fiordos a un albañil gigante llamado Tute Rakiwhanoa, que talló los valles escarpados con su hacha.
En todos los costados de los fiordos, cascadas espectaculares caen de forma incesante y las lluvias abundantes de la región encuentran su camino hacia el mar.
Milford Sound, que fue descrito por Rudyard Kipling como "la octava maravilla del mundo", siempre es espectacular, y los visitantes pueden apreciar su belleza a través de vuelos panorámicos y cruceros.
Ubicando el Parque
La región está situada en la costa suroeste de la Isla Sur y la ciudad más cercana al Parque es Te Anau. La región sur de los Alpes cubre este parque y junto con las aguas cristalinas de la costa, el parque cuenta con una diversidad de flora y fauna. El parque es el epítome de la diversidad natural con picos montañosos, selvas, lagos, cascadas, glaciares y valles. Lo que sea y podrá explorarlo en el parque.
Consejos y trucos
Cuándo ir: de [noviembre]] a abril (finales de la primavera hasta principios del otoño) es la mejor temporada para una visita a Fiordland, ya que hay una mayor probabilidad de sol. Sin embargo, todos los visitantes deben tener en cuenta que Fiordland es el lugar más húmedo de Nueva Zelanda y uno de los lugares más húmedos del mundo, con Milford Sound registrando una precipitación anual promedio de entre 1.200 y 800 milímetros. El clima es extremadamente cambiante e incluso durante el apogeo de la lluvia torrencial del verano a menudo golpea la región.
Trate de evitar: la temporada alta es febrero, y el municipio de Te Anau puede estar extremadamente ocupado durante este mes con un alojamiento sólidamente reservado. Intente evitar este mes o reserve su alojamiento con suficiente antelación.
Dónde alojarse: Te Anau es la base principal del Parque Nacional Fiordland y cuenta con excelentes instalaciones de alojamiento que van desde campings y hostales básicos para viajeros con bajo presupuesto hasta hoteles cómodos de estilo medio y casas de vacaciones con cocina, así como cabañas más lujosas. Manapouri tiene menos opciones.
No olvides traer: el equipo para clima húmedo es imprescindible, incluso en verano.
Organización de caminatas de varios días: el [[Departamento de Conservación de Nueva Zelanda]] (]]DOC]]) se ocupa de todas las rutas de senderismo de varios días, y la mayoría debe reservarse con anticipación (para alojamiento en cabañas y, a veces, transporte) a través del sitio web de DOC (www.doc.govt .Nueva Zelanda). Tenga en cuenta que la «Temporada de los Grandes Paseos» se extiende de noviembre a abril y, dado que el clima es el mejor para caminar durante este tiempo, debe planificar con la mayor anticipación posible para obtener un lugar. Las caminatas están abiertas durante todo el año, pero debido a las condiciones climáticas adversas de mayo a octubre (y la amenaza de inundaciones y avalanchas), las caminatas de varios días de Fiordland solo deben ser intentadas durante este tiempo por excursionistas extremadamente experimentados y bien preparados.
Cómo llegar
Se puede acceder fácilmente al parque a través de una sola carretera principal, la carretera estatal 94 que pasa por el pueblo de Te Anau. Pero incluso la carretera estatal 95 junto con otros 2 o 3 caminos estrechos de grava y caminos de rastreo se pueden usar para llegar al parque. También puede tomar un vuelo panorámico a la zona de Te Anau.
En automóvil: El viaje desde Queenstown a Te Anau por la autopista estatal 6 y la autopista estatal 94 toma alrededor de 2 horas y media y es extremadamente pintoresco.
En autobús público: los servicios diarios de autobús público funcionan entre Queenstown y Te Anau.
En avión: durante el verano, operan tres vuelos por semana entre Queenstown y el aeropuerto de Te Anau. Los grandes aeropuertos más cercanos para vuelos a Auckland y Wellington se encuentran en Queenstown, Dunedin e Invercargill.
Justificación de la inscripción
- Criterio (vii): Contiene fenómenos naturales superlativos o áreas de excepcional belleza natural e importancia estética.
- Criterio (viii): Es uno de los ejemplos representativos de importantes etapas de la historia de la tierra, incluyendo testimonios de la vida, procesos geológicos creadores de formas geológicas o características geomórficas o fisiográficas significativas.
- Criterio (ix): Es uno de los ejemplos eminentes de procesos ecológicos y biológicos en el curso de la evolución de los ecosistemas.
- Criterio (x): Contenie los hábitats naturales más representativos y más importantes para la conservación de la biodiversidad, incluyendo aquellos que contienen especies amenazadas de destacado valor universal desde el punto de vista de la ciencia y el conservacionismo.
