Templo Rosalila

Templo Rosalila
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Templo rosalila.jpg
TipoTemplo
UbicaciónCopán, Bandera de la República de Honduras Honduras
Arquitectura
Construcción571 d. C.
FundadorLuna Jaguar
CatalogaciónPatrimonio Mundial

Templo Rosalila. Templo de la civilización maya, construido en el año 571 d. C. Es una joya arqueológica única en el mundo, también conocido como Templo del Sol.

Ubicación

Se encuentra ubicado debajo de la pirámide 16 del complejo arqueológico maya de Copán, en Honduras.

Descubrimiento

El 23 de junio de 1989, el arqueólogo hondureño Ricardo Agurcia Fasquelle (en la actualidad director ejecutivo de la Asociación Copán) descubrió un templo único y extraordinario. Mientras exploraba bajo el Templo 16, encontró la muestra mejor conservada de arquitectura monumental en Copán. Le dio por nombre “Rosalila” (nombre de un color), siguiendo un sistema de nomenclatura establecido en el Proyecto Tikal.

A Rosalila no lo destruyeron los antiguos mayas, como a otros edificios que han encontrado los arqueólogos. Fue enterrado con mucho esmero y con mucha ceremonia. Sus cuartos, molduras y nichos se rellenaron con mucho cuidado con lodo y piedras, mientras que sus paneles trabajados en estuco los cubrieron con una capa gruesa de mortero blanco. Este mortero protege aun las numerosas capas de pintura original de Rosalila.

Historia

Un suceso que dio la vuelta al mundo fue el hallazgo, en 1989, de Rosalila, por el arqueólogo hondureños Ricardo Agurcia. Este templo es el primer ejemplo, descubierto en Copán, de una estructura completa, con su arquitectura y escultura intactas, ya que los Mayas lo aterraron con enorme cuidado antes de levantar sobre él otra edificación. El arqueólogo hondureño encontró un nicho rodeado por piedras de río dentro del cual había una ofrenda depositada al momento de sepultar el templo.

El templo se utilizaba para diversas ceremonias, entre ellas el culto al rey de Copán, K'inich Yax K'uk' Mo', que se identificaba con el Sol y fue construido por el décimo gobernante de la dinastía maya Luna Jaguar al suroeste de la Plaza de Los Jaguares. Para admirarlo hay que acceder a él utilizando la red de túneles. Se llama templo de Rosalila por el color rosáceo de su piedra.

Arquitectura

Es un edificio de tres cuerpos, montado uno sobre el otro, a manera de un pastel de boda. Su tamaño equivale, en términos modernos, a una construcción de más de cuatro pisos.

El cuerpo inferior del templo tiene un tamaño de 12.5 por 18.5 metros, con su eje principal orientado de Norte a Sur. Su altura es de 5.7 metros. El segundo nivel se alza a 3.7 metros sobre el primero y lo rodea una moldura que sirve de marco a su única puerta en el lado Norte. El tercer nivel es el menos preservado y su altura es de 3.5 metros con una planta de 4.3 por 8.2 metros.

Datos y figuras

Rosalila mide 12.9 metros de alto y tiene tres pisos. Los dos niveles superiores sirven como una gigantesca cartelera pre-Colombina y despliegan un complejo trabajo artístico religioso del Clásico Temprano. El nivel más bajo se compone de cuatro cuartos, largos y angostos, y solamente cruzando los tres primeros se puede llegar al cuarto central y más íntimo. Dentro de estos espacios sagrados, los mayas realizaban importantes ceremonias. A medida que lo iban enterrando, los mayas colocaron hermosas ofrendas en estos cuartos.

La base del edificio mide 18.5 por 12.5 metros y la fachada principal está hacia el oeste. El templo está ubicado sobre una pirámide terraceada de tres metros de alto, bautizada como “Azul”. Comparada con otras pirámides en Copán, Azul es pequeña, ya que en general pueden llegar a tener hasta 20 metros de alto. Igual que otros templos, construidos en el eje central de la Acrópolis, las graderías principales están al oeste, la dirección que los mayas asociaban con la entrada al otro mundo, el mundo de los muertos, el lugar donde el sol moría diariamente. En la gradería principal hay siete gradas y el peldaño quinto tiene una fecha jeroglífica de dedicación: 21 de febrero del año 571 d.C. Esta fecha está cerca del final del reino de Luna Jaguar, décimo gobernante de Copán.

Función

Las paredes internas del templo estaban cubiertas con hollín, consecuencia de la actividad de quemar incienso y de utilizar antorchas, algo similar a las paredes de muchas viejas iglesias. Dentro del templo habían numerosos artefactos que reflejan prácticas religiosas antiguas. Agurcia encontró siete incensarios de barro con carbón todavía adentro. Dos de estos estaban sobre pedestales de jaguar esculpidos en piedra. También encontró ofrendas de cuchillos de pedernal (para sacrificios), nueve elaborados excéntricos de pedernal (cetros ceremoniales) envueltos en restos de una bolsa de tela de un color azul profundo, joyería tallada en jade, conchas de mar, espinas de manta raya (perforadores para ritos de sangrado), vértebras de tiburón, uñas de jaguar y restos de pétalos de flores y de agujas de pino. Algunos de estos restos (particularmente los incensarios y las flores) traen a la mente prácticas religiosas todavía en uso entre los mayas modernos.

Rosalila fue el santuario principal religioso en Copán en las postrimerías del Siglo VI d.C. Es la muestra preservada más completa que se ha encontrado, hasta ahora, del arte y de la arquitectura maya de este período. Así como puede aparecer la cubierta de un manuscrito ilustrado, las fachadas de este edificio están elaboradamente decoradas con mensajes religiosos complejos. Los temas son cosmológicos y enfatizan al Dios Sol, K’inich Ahau—el patrón divino de los reyes mayas y el tocayo espiritual del fundador de la dinastía, K’inich Yax K’uk Mo’.

Los excéntricos

Sitio para ofrendas

La ofrenda consistía en 9 excéntricos, cuchillos de pedernal, 3 conchas marinas, una cuenca de jade y una gran cantidad de restos orgánicos. En cada uno de los excéntricos hay por lo menos el rostro de un personaje que probablemente se trate de un gobernante. Sobre la fachada de Rosalila fueron descubiertos enormes mascarones de estuco, los cuales han venido siendo revelados y expuestos con suma precaución. Y para que los visitantes puedan admirarlo con mayor comodidad, en el museo deesculturass se encuentra expuesta una réplica de Rosalila.

Cuando Rosalila fue sepultada se le brindó un gran homenaje al aterrarlo tan cuidadosamente que se preservaron no sólo su arquitectura, también su decoración externa. El tema central de esa decoración es el VucubCaquix (pájaro celestial), que coronaba la parte superior del universo maya. Los ojos del ave están representados al centro del segundo nivel del templo, y entre estos emerge el pico proyectado hacia abajo. En el primer cuerpo, arriba y a los costados de la puerta, están representadas las alas. Entre las plumas sale un pequeño medallón, con el rostro en perfil del Dios Sol (kin), rodeado por un cartucho del símbolo "yax".

Fuentes