Manuel Quevedo Báez
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Manuel Quevedo Báez . Médico, historiador, escritor y educador puertorriqueño.
Síntesis biográfica
Manuel Quevedo Báez nació el 24 de diciembre de 1855 en Sabana Grande, Puerto Rico.
Trayectoria
Bajo la tutela del caborrojeño Pedro Rodríguez Acosta y del sacerdote Manuel Fontán Sánchez aprendió latín, matemáticas, español e inglés. Ingresó como interno en el Instituto de los Padres Jesuitas, en Santurce, y continuó estudios de bachillerato en el Instituto Civil de Segunda Enseñanza, donde se graduó en 1886. En 1884 fundó, junto con varios de sus compañeros de estudios, el periódico literario El Palenque de la Juventud, que también dirigió. Bajo el seudónimo de “Luz de Selenio”, escribía breves artículos políticos de inclinación autonomista en periódicos de Ponce y Mayagüez.
En 1887 viajó a España con el propósito de realizar estudios superiores. Se tituló como Doctor en medicina en el Hospital General de Madrid, en 1894, y se integró como miembro al Colegio de Medicina de Madrid. En su estadía en España siempre se mantuvo vinculado a las problemáticas políticas y sociales.
Al regresar a Puerto Rico se desempeñó como médico en Barceloneta, Utuado y Mayagüez. Participó activamente en la creación de la Asociación Médica de Puerto Rico y la Academia de Medicina.
Como estudiante en la capital puertorriqueña había sentido inclinación hacia la autonomía conservadora que propulsaba Rafael María de Labra. El cambio de soberanía tras la intervención estadounidense de 1898 lo llevó a unirse a las filas del Partido Republicano, entonces dirigido por el doctor José Celso Barbosa. Durante ese período publicó numerosos artículos exponiendo sus puntos de vista republicanos. Pasados los primeros años bajo el nuevo régimen, se inclinó por el ideal de la independencia. Comenzó a participar en asociaciones y a escribir artículos que promovían esos ideales.
Con el cambio de siglo Quevedo se trasladó a San Juan, donde se desempeñó como secretario de la Junta Examinadora de Médicos. La atención médica a pacientes que residían en zonas montañosas o poco salubres, como los arrabales, se hacía difícil, escaseaban los medios e instalaciones adecuados para el ejercicio de la medicina, y existían médicos en ejercicio que habían obtenido sus diplomas con solo meses de estudios. En tales condiciones se necesitaba organizar la clase médica esparcida por toda la Isla, y Quevedo, con otros colegas, se propuso fundar una asociación que protegiera los intereses de los galenos y divulgara de manera efectiva los análisis y estudios relacionados con el tratamiento y la cura de diferentes condiciones de salud. En 1902 un grupo de médicos, del que formó parte, se reunió con la Cámara de Delegados en la Diputación Provincial (hoy Departamento de Estado), y allí suscribieron los convenios que dieron luz a la Asociación Médica. En 1903 apareció el primer número del Boletín de la Asociación Médica Puertorriqueña —luego denominado Boletín Médico—, del cual Quevedo fue editor. En ese número inicial se presentó la legislación que daría origen al Tribunal Examinador de Médicos.
Manuel Quevedo no sólo se interesó por el progreso de la medicina, sino también por el de la cultura puertorriqueña. De 1904 a 1906 dirigió el Ateneo Puertorriqueño, y tuvo que combatir la intención del gobierno de cerrar la institución. En 1905 colaboró en la creación de la Revista del Ateneo. Como fundador de esta publicación y editor del Boletín Médico, Quevedo concertaba sus intereses por la ciencia y por la cultura. En el Boletín Médico publicaba estudios sobre problemas de salud como Fiebre amarilla, Lupus, Tuberculosis, Mortalidad infantil, Lepra, Uncinariacis y Anemia, esta última muy común entre la población más pobre de Puerto Rico. Mientras, en la Revista del Ateneo abordaba temáticas relacionadas con la cultura regional, en artículos sobre folclore, historia, ética y civismo, entre los cuales fueron notables "La madre enferma", "El secreto de las cartas", "Cosas que pasan", "Huellas del tiempo" y "Cartas femeninas".
Manuel Quevedo participó en el proceso de fundación de la Asociación Cívica Puertorriqueña en la primera década del siglo XX. Esta asociación tenía también como finalidad política la educación del pueblo de Puerto Rico para promover ante el Congreso de Estados Unidos la solicitud de un plebiscito cuya finalidad era alcanzar la república, con o sin el protectorado de Estados Unidos. En esta asociación trabajó con el poeta Luis Llorens Torres y con Vicente Balbas Capó.
Manuel Quevedo dirigió el Consultorio de la Sociedad de Auxilio Mutuo y Beneficencia durante veintiún años, hasta 1933. Fue miembro fundador, parte de la Junta Directiva y profesor del Instituto Universitario José de Diego -antes llamado Escuela Superior José de Diego-, que presidió entre 1916 y 1918. En 1915 fundó, junto a otros galenos, la Academia de Medicina de Puerto Rico, de la que fue elegido académico de número al año siguiente. También tomó parte en la creación de la Academia Antillana de la Lengua, presidida por el político y poeta José de Diego.
Fue presidente de la Academia de Medicina de Puerto Rico y, junto con el historiador Cayetano Coll y Toste, trabajó en la sección Historia de la Medicina y Bibliografía Regional y Desarrollo de los Estudios Médicos en Puerto Rico.
En 1924 fue nombrado presidente del Tribunal Examinador de Médicos, y se mantuvo en el cargo hasta 1931. También perteneció a la Comisión de la Policía Insular y fue Director de Higiene Escolar en el municipio de San Juan. Sin descuidar su vocación de escritor, por esta época se mantuvo activo en el ámbito literario publicando artículos en los periódicos El Mundo y Puerto Rico Ilustrado, así como en la revista Antena.
En 1946 publicó su Historia de la medicina y cirugía en Puerto Rico, obra que figura como una de las más trascendentales en la bibliografía médica de Puerto Rico.
Fallece
Manuel Quevedo Báez falleció el 22 de septiembre de 1955 en San Juan, Puerto Rico. En la actualidad, un Centro Cultural lleva su nombre.
Fuentes
- Artículo disponible en: Dr. Manuel Quevedo Báez.
- Artículo disponible en: Manuel Quevedo Báez.
