Museo de Arte Moderno (Sao Paulo)

Museo de Arte Moderno de Sao Paulo
Información sobre la plantilla
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Museo de Arte Moderno de Sao Paulo
Información geográfica
PaísBandera de Brasil Brasil
CiudadSao Paulo
Información general
Inauguración1968

El Museo de Arte Moderno (MAM) de São Paulo,(en portugués: Museu de Arte de São Paulo, o MASP) es una institución sin fines de lucro fundada en 1948 en Brasil.

Su colección comprende más de cinco mil obras de arte moderno y contemporáneo brasileño, incluyendo formatos tradicionales. Además contiene videos, performance y varias instalaciones que dan brillo y popularidad al lugar.

El MAM mantiene un programa anual de exposiciones temporales y produce cada dos años el Panorama del Arte Brasileño, que mapea la producción brasileña contemporánea. Considerando la creciente importancia del arte brasileño en el contexto global, Panorama se ha convertido en un evento relevante en el circuito cultural internacional.

En 2003, el edificio fue registrado como Patrimonio Nacional por el Instituto Brasileño de Patrimonio Histórico y Artístico.

Misión

La misión del Museo de Arte Moderno es de difundir el arte y la cultura brasileña también se apoya en su biblioteca, que ofrece más de 65 mil títulos y documentos, y su división editorial, que elabora catálogos, libros y la revista trimestral del Museo de Arte Moderno (MAM).

Ubicación

El Museo de Arte Moderno de São Paulo es un museo ubicado en el Parque do Ibirapuera, en la Avenida Paulista de la ciudad de São Paulo, Brasil.

Descripción

Es bien conocido por su sede, una estructura de hormigón y vidrio, diseñada por Lina Bo Bardi en de 1968. Cuyo cuerpo principal está sostenido por dos vigas laterales sobre un espacio independiente de 74 metros (243 pies), considerado un hito de la ciudad y un símbolo importante de la arquitectura brasileña moderna.

El actual edificio del museo fue construido por el Ayuntamiento de São Paulo e inaugurado en 1968, en presencia de la Reina Isabel II del Reino Unido.

Es famoso por su notable estructura brutalista y es considerado uno de los hitos de la arquitectura moderna brasileña. El edificio fue levantado en el antiguo emplazamiento de Belvedere Trianon, en la Avenida Paulista desde donde se podría observar el centro de la ciudad y la Sierra de Cantareira.

José Borges de Figueiredo, el inversor que vendió el solar al Ayuntamiento, escribió una carta no vinculante a la administración, pidiendo que se conserve como "lugar público a perpetuidad". Si bien en los años siguientes múltiples proyectos propuestos ignoraron su deseo, la idea de una construcción subterránea o, en caso contrario, sostenida fue elegida por la arquitecta Lina Bo Bardi y el ingeniero José Carlos Figueiredo Ferraz. Quienes concibieron un bloque subterráneo, así como una estructura sostenida, que estaría a ocho metros del piso, con el uso de cuatro pilares conectados por dos enormes vigas de hormigón.

Debajo de esas vigas se encontraba lo que se consideraba un atrevimiento, es decir, un espacio libre de 74 metros (243 pies) entre los pilares y debajo de las vigas; el más grande del mundo en ese momento. El edificio inauguró la denominada técnica protegida de hormigón armado en Brasil.

En la construcción de aproximadamente 10,000 metros cuadrados (110,000 pies cuadrados), se encuentran, además, las salas de exhibición permanente y temporal - biblioteca, galería de fotos, galería de películas, galería de videos, dos auditorios, restaurante, tienda, talleres, oficinas administrativas y un Área reservada técnica.

Las instalaciones y los acabados del edificio son acogedores, como describe la propia Lina Bo: "Hormigón a la vista, encalado, suelo de losas que cubre el gran Salón Cívico, vidrio templado, paredes de plástico. Suelo industrial de caucho negro que cubre los espacios interiores. El mirador es un cuadrado con plantas y flores alrededor, pavimentado con paralelepípedos, según la tradición ibero-brasileña. También hay espacios de agua, pequeños espejos de agua con plantas acuáticas.

En el ámbito museográfico, Lina Bo Bardi también innovó al utilizar láminas de cristal templado apoyadas sobre bases de bloques de hormigón como soportes de exposición de las pinturas. La intención es imitar la posición del lienzo en el caballete del pintor. En el reverso de estos soportes, que ya no se utilizan, había tablones con información sobre el pintor y la obra. Paradójicamente, el museo abandonó este modelo expositivo al mismo tiempo que, a finales de los años noventa, comienza a ser notado e implementado por instituciones extranjeras.

Entre 1996 y 2001, la actual administración del museo emprendió una vasta y controvertida reforma. No obstante la indispensable restauración de la estructura general, el arquitecto y exdirector de la institución Julio Neves determinó la sustitución del piso original concebido por Lina Bo, la instalación de un segundo ascensor, la construcción de un tercer piso subterráneo y la sustitución de los espejos de agua para jardines. Muchos arquitectos alegan que la reforma provocó una profunda descalificación del proyecto original de Lina

Actividades

Tratando de atender las múltiples necesidades de la sociedad contemporánea y su diversidad, el MAM desarrolla diversas actividades culturales y educativas como: cursos, talleres, sesiones de cine experimental, proyectos musicales y presentación de performances para todos los públicos, así como ofertas de vanguardia como audioguías con descripción de obras de arte para personas ciegas y videoguías o recorridos en Lenguaje de señas para personas sordas.

Historia

El museo fue inaugurado y abierto al público el 2 de octubre de 1947, mostrando las primeras adquisiciones, entre las que se encuentran lienzos de Picasso y Rembrandt. En estos primeros años de actividad, el museo se ubicó en el primer piso de la sede de Diarios Associados.

Lina Bo Bardi fue la encargada de adecuar el edificio a las necesidades del museo, dividiéndolo en cuatro áreas diferenciadas: galería de arte, sala de exposiciones didácticas sobre historia del arte, sala de exposiciones temporales y auditorio.

MASP fue la primera institución brasileña interesada en adquirir obras de arte moderno. El museo se convertiría rápidamente en un punto de encuentro de artistas, estudiantes e intelectuales, atraídos no solo por su acervo, sino también por los talleres y cursos de historia del arte, las exposiciones temporales de artistas nacionales y extranjeros y el programa educativo, abierto a recibir manifestaciones de múltiples campos del arte, como el teatro, el cine y la música.

En la década de los 50 el museo incrementó su actuación didáctica, creando el Instituto de Arte Contemporáneo (que ofrece talleres de grabado, dibujo, pintura, escultura, danza y diseño industrial), la Escuela de Publicidad (actualmente Escuela Superior de Propaganda y Marketing), organizando debates sobre cine y literatura y creando una orquesta juvenil y una compañía de ballet. Los cursos fueron impartidos frecuentemente por importantes nombres del panorama artístico brasileño, como los pintores Lasar Segall y Roberto Sambonet, los arquitectos Gian Carlo Palanti y Lina Bo Bardi, el escultor August Zamoyski y el técnico cinematográfico Alberto Cavalcanti.

Junto con la ampliación del programa educativo, el museo fue testigo del crecimiento en importancia de su colección y del reconocimiento internacional de la institución. Entre 1953 y 1957, una selección de 100 obras maestras de la colección del museo viajó por museos europeos, como el Musée de l'Orangerie (París) y la Tate Gallery (Londres), en una serie de exposiciones organizadas con la intención de consolidar la colección. . En 1957, la colección también se exhibió en los Estados Unidos, en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York y en el Museo de Arte de Toledo. Al año siguiente, los fondos de MASP se exhibieron en otras sedes brasileñas, como el Museu Nacional de Belas Artes, en Río de Janeiro.

El alto nivel de excelencia artística de sus exposiciones impulsó al museo esos primeros años. El resultado fue una gran notoriedad y prestigio, lo que aumentó la asistencia y el interés por las bellas artes.

Opinión de expertos

Felipe Chaimovich, curador del MAM, declara: "Ojalá el MAM se convierta cada vez más en un museo experimental de arte contemporáneo. El ArtProject nos permite llegar a un público más amplio, enfatizando así nuestra misión pedagógica, y estimula al visitante a venir al MAM. La asociación con ArtProject es un logro importante para nuestra institución ".

Fuentes