Vibraciones del cuerpo humano

Vibraciones del cuerpo humano
Información sobre la plantilla
Vib.jpg
Concepto:Las vibraciones actúan junto a otros factores como la elevada tensión mental, el ruido y las sutancias tóxicas presentes en un ambiente laboral.

Vibraciones del cuerpo humano. Uno de los temas más controversiales en la higiene del trabajo es el de las vibraciones trasmitidas al cuerpo humano, debido a que no existen estudios concluyentes que relacionen causa y efecto entre la exposición de las vibraciones y los síntomas presentados. Y es que las vibraciones actúan junto a otros factores como la elevada tensión mental, el ruido y las sutancias tóxicas presentes en un ambiente laboral.

En ocasiones existe poca profundidad en el manejo del tema por la falta de profesionalidad e interés, y tambien una baja demanda de estudios técnicos que enriquezcan el conocimiento de este fenómeno.

Origen

Las vibraciones se definen como movimientos oscilatorios de un cuerpo alrededor de de un punto de referencia y pueden producirse como efecto del funcionamiento de una máquina o un equipo. Su intensidad se mide mediante un vibrómetro, instrumento que determina la aceleración, velocidad y desplazamiento en metros por segundo(m/seg).

La alta frecuencia (de 20 a 1000 Hz) puede ser producida por herramientas manuales rotativas o alternativas, eléctricas, neumáticas o percutoras tales como molinos, pulidoras, lijadoras, motosierras, martillos picadores, rompehormigón, martillos neumáticos, taladros, caladoras, sierras, remachadoras. Si es baja (de 1 a 20 Hz), la ocasionan vehículos de transporte de pasajeros o de mercancías, equipos industriales como monta cargas, carretillas, etc, puentes, grúas, tractores y maquinarias agrícolas, y vehículos de obras públicas. Cuando es muy baja (menos de 1 Hz) pueden causarla aviones, trenes, barcos, automóviles.

Características

Con frecuencia el cuerpo humano está sometido a efectos de vibraciones, es decir a los movimientos oscilatorios que pueden estremecer todo el cuerpo o ser focalizados a una parte de él, por ejemplo, a un músculo específico por el masaje vibratorio al cráneo cuando nos lavamos el cabello.

La vibración local es muy usada en el deporte, peluquerías, barberías y en la terapéutica de rehabilitación para algunas enfermedades, su beneficio radica en que la frecuencia es baja, por debajo de los 20 hertzios.

La corriente alterna que llega a nuestros hogares es de 60 hertzios o ciclos y cuando por equivocación nos ponemos en contacto con ella produce una vibración o sacudida que se asimila segun la mayor o menor tolerancia individual del afectado. El masaje terapéutico aplicado por nosotros mismos o por un personal calificado de la salud origina movimientos oscilatorios que traen beneficios, como incremento de la circulación de la sangre, relación muscular y antiestrés. También los estímulos eléctricos y la magnetoterapia para tratamientos de fisioterapia ocasionan ese efecto.

Efectos sobre el organismo humano

De acuerdo con la frecuencia de la vibración, se presentan diversos efectos sobre el organismo.

Cuando es alta puede provocar lesiones en las articulaciones como en los huesos de las muñecas provocando dolores y limitaciones en los movimientos, pudiéndose observar estas afectaciones degenerativas en las radiografías, puede provocar trastornos vasculares en las manos, principalmente con sensación de falta se sensibilidad en los dedos, y trastornos digestivos.

Como efecto de la frecuencia baja se presentan dolor en la espalda baja, conocido como lumbago, hernias discales y otros malestares en el nervio ciático, que pueden incrementarse por alteraciones posturales o malos hábitos en el manejo de algún instrumento, alteraciones del equilibrio y trastornos de la visión por resonancia.

Si la frecuencia es muy baja, ocasiona mareos, afecta el oido medio por lo que disminuye la audición y en algunos casos hasta sordera por ruidos intensos, vómitos y otras alteraciones del Sistema Nervioso Central.

Medidas de control

Entre las necesarias medidas de control se recomienda:

  • Atenuar la trasmisión de las vibraciones colocando manijas o asas de material elástico o absorbente de las vibraciones.
  • Reducir el tiempo de exposición, con pausas aplicadas de igual forma a las utilizadas para el control del ruido.
  • Uso de guantes, cinturones, plantillas de calzado y muñequeras antivibracionales.
  • Establecer procedimientos para mantener caliente las manos del trabajador.
  • Enseñar la forma de asir la empuñadura de las herramientas, que deben ser con la menor fuerza que permita ejecutar el trabajo.
  • Indicar señales ordenativas de los equipos de protección personal que deben utilizarse.
  • Establecer sistemas de vigilancia epidemiológica por parte de los diferentes organismos competentes.

Fuentes

  • Periódico trabajadores.Dr. Miguel R. González Corona. Especialista de II Grado en Ortopedia y Traumatología. Especialista en Medicina Física y Rehabilitación. Profesor Consultante