Congreso Obrero de Cruces
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Congreso Obrero de Cruces. Evento sindical de carácter nacional celebrado en Cruces, Las Villas en febrero de 1912; con la participación de dirigentes obreros de Occidente, Centro y Oriente de Cuba.
Aunque no lograra su objetivo, su realización fue expresión del salto que estaba teniendo la clase obrera cubana desde los inicios del siglo XX a posiciones más sólidas en su lucha por alcanzar sus derechos.
Sumario
Antecedentes
La segunda mitad del siglo XIX y los inicios del XX marcaban para la localidad de Cruces cambios sustanciales producto a la existencia de extensas tierras fértiles para el cultivo de caña de azúcar lo que propició el crecimiento desde 1884 de la producción azucarera dinamizándose esta rama llegando esta región a aportar al país más del 8% del azúcar que se producía lo que facilitó que además del asentamiento de las familias se registraran en esta zona inmigrantes fundamentalmente provenientes de España.
Desde la primera década del siglo XX Cruces unido a Lajas y Cartagena forma un importante nudo ferroviario de la principal zona azucarera del centro-sur del país y centro de las comunicaciones telegráficas, aspecto este último fundamental para lograr informaciones desde distintos puntos de la geografía cubana lo que permitía conocer el acontecer del movimiento obrero y sumarse a las luchas existentes en aquella etapa.
Aunque en estos primeros años en Cuba existió una fuerte penetración de Estados Unidos, en Cruces se mantiene la propiedad mayoritariamente nacional ya que según datos que se recogen en Síntesis histórica Municipal, Cruces, de un total de 117 fincas 99 eran propiedad de cubanos, 13 de españoles y 5 de ingleses lo que demuestra que los norteamericanos no pudieron extender su dominio en esta zona, no obstante, el Central Dos Hermanas era propiedad de la Sugar Company.
El arraigo nacional se mantenía presente denotándose en las costumbres, la cultura y la historia como algo valioso para proteger y defender sobresaliendo su orgullo por haber sido la localidad en la zona de Mal Tiempo donde se protagonizó por el Generalísimo Máximo Gómez la victoriosa batalla contra el ejército español, contienda que además propiciaría que cubanos y especialmente los crucenses vinculados a la industria azucarera inspirados en esta hazaña, suspendieran las labores de preparación de la zafra y desarticularan las máquinas de los ingenios constituyendo un duro golpe económico para los colonialistas de la región y a su vez los días posteriores al 15 de diciembre de 1895 fecha en que se desarrolló este acontecimiento, el Ejército Español sufriría una cadena de derrotas ocasionadas por los mambises.
Desde inicios del siglo XX en Cruces las calles habían comenzado a tener nombres de patriotas de las guerras de independencia, así como los clubes, surgiendo el Club José Martí y el Club Moncada los cuales aún estaban marcados por diferencias racistas.
Ya desde fines del siglo XIX las profundas transformaciones económicas habían impactado en lo político, social y cultural. La introducción y el fomento de la explotación de formas de transporte como el ferrocarril debido al desarrollo de la rama azucarera y además constituir un enlace entre los puertos de Sagua y Cienfuegos hacen de esta región su génesis para un avance armónico en este sentido y que también derive en el auge del comercio haciendo que en el ámbito económico las condiciones fueran propicias para desarrollar un sentimiento de pertenencia por esta zona.
El florecimiento de la localidad se acentúa con la aparición de múltiples fuentes de empleo que aunque representan una seguridad y bienestar para sus pobladores hacen que estos sientan sobre sus espaldas la explotación ya que no se respetan las mínimas condiciones de los trabajadores convirtiéndose en causa para que se inicie una lucha por reivindicaciones lo que hace necesario aunar esfuerzos en aras de lograr conquistas laborales ya que están conscientes de que son el eje de las transformaciones que se van sucediendo lo que influye necesariamente en el pensamiento y la actuación de estos sujetos lo que conlleva a que varíen las necesidades de esa sociedad orientándose a la búsqueda de mayores pretensiones.
Situación geopolítica
Cruces es una zona situada en el centro sur de Las Villas como parte de la división política administrativa fruto de la demarcación efectuada por España en la isla en esa etapa, un pequeño poblado que en comparación con las grandes urbes no se tiene en cuenta para ofrecer la importancia requerida a determinados acontecimientos que allí se suceden, aunque es notorio su accionar en todos los periodos. El hecho de estar en el centro del país y servir de enlaces con Sagua, Santa Clara y Cienfuegos hace que cobre un singular valor.
Como parte de los antecedentes que tienen un impacto en el movimiento obrero en la etapa colonial está el desarrollo del Congreso Obrero de 1892 en La Habana el cuál fue el primero de esta categoría definiendo como su gran misión y de los trabajadores asociados conseguir que los obreros del campo y de las poblaciones despertaran a la lucha de clases.
En el libro titulado Los Congresos Obreros en Cuba se detalla que en su declaración final se plantea crear la federación en toda la isla, y lograr unir nuestros esfuerzos para ganar en potencia frente a los patrones.
Para ello se trazan los siguientes acuerdos:
- Que en cada población de la isla se formará una sociedad de carácter general dividida en secciones de oficios y profesiones.
- Estas secciones tendrán dentro de la sociedad general libertad de acción, o lo que es lo mismo, serán autónomas entre sí.
- Estas sociedades de carácter general que se forman en cada pueblo pactarán entre sí, formando de este modo, la Federación Regional Cubana.
En esa etapa predominaba la corriente anarquista la cual llega a la localidad de Cruces con la existencia de un flujo poblacional con estas características que trasmiten sus inquietudes al resto de la población.
En 1903 se crea el Gremio de Trabajadores del pueblo de Cruces que organizó a la mayoría de estos incluyendo a los que laboraban en los centrales con el objetivo de exigir demandas de tipo económico. Unos años después en 1906 se crea el Gremio de los Carpinteros.
Convocatoria
El Centro Obrero de Cruces sería la organización llamada a realizar la convocatoria que invitó a todos los trabajadores de Cuba para el 24 y 25 de febrero de 1912 publicándose la misma en La Habana en el semanario ¡Tierra! y en importantes gacetas de Cienfuegos como El Comercio'‘ y La Correspondencia.
La Correspondencia'‘, el miércoles 26 de febrero redacta:
De igual manera resalta las adhesiones y representaciones que asistieron:
- Grupo editor de ¡Tierra!
- Centro de Estudios Sociales de La Habana.
- Agrupación Racionalista Ferrer de La Habana.
- El Socialista de La Habana.
- Juventud Obrera de La Habana.
- Asociación de Albañiles y Peones de La Habana.
- El Escogedor de San Antonio de los Baños.
- Gremio de Cocheros de Cienfuegos
- Unión de Estibadores de Cienfuegos
- Centro Obrero de Cienfuegos.
- Asociación de Albañiles, Carpinteros y Ayudantes de Santa Clara.
- Escogedores de Tabaco de Santa Clara.
- Asociación de Matarifes y tablajeros de Santa Clara.
- Grupo Verdad de Remedios.
- Centros Obreros del Comercio de Manzanillo.
- Centro de Marines y Estibadores de Manzanillo.
- Centro Obrero de Santiago de Cuba.
- Grupo de Trabajadores de la Isabela de Sagua.
- Centro Obrero de Real Campiña.
- Grupo de trabajadores del barrio Carrillo de Santa Clara.
- Gremio de Panaderos de La Habana.
Además, plasman que asistió un considerable número de grupos de adhesiones individuales de compañeros de distintos puntos de la Isla y que tienen como proyecto celebrar un Segundo Congreso en Julio venidero.
Fue un evento en el que estuvieron presentes unos 21 delegados de distintas organizaciones y grupos, y mandó su adhesión un número similar de agrupaciones y personalidades obreras no representadas en el mismo. Precisa que los delegados venían de Las Villas, Matanzas y La Habana, y que entre las adhesiones hubo solo dos o tres de las provincias Orientales, siendo los lugares de mayor representación la ciudad de Santa Clara con siete y la zona de Cruces y Lajas con seis, apunta que curiosamente asistió un solo delegado de Cienfuegos.
Simultáneamente con el desarrollo del Congreso, ese 24 de febrero en Cruces se realizaron fiestas, desfiles y actuaron las bandas de esa localidad y de Lajas pertenecientes a las escuelas, evento organizado por la asociación de maestros de estas zonas, como parte de lo aprobado en la Asamblea del Cerro de declarar fiesta nacional el día de reinicio de la gesta independentista.
Participación femenina
Emilia Rodríguez ya se había destacado en actividades previas y para este Congreso se hicieron varias exhortaciones para que al mismo concurrieran mujeres. Según refleja John Domoulin, José Pujol de Cruces, escribió al semanario ¡Tierra! de La Habana al respecto:
Aurora Rodríguez de García, miembro de una conocida familia de anarquistas, le contestó:
Sin embargo, Emilia fue la única delegada al Congreso, previamente se había destacado en otras actividades realizadas en Cruces ya que junto a su esposo participó en la velada de inauguración del Centro Obrero y fue designada para realizar las conclusiones de la misma, por tanto, no es de asombrar que ante las exhortaciones se comprometiera de inmediato, siendo la que presidió el cónclave.
Emilia Rodríguez de Lípiz fue una valiente luchadora revolucionaria, en una época en que no era común que las mujeres se mezclaran en política. Su esposo Vicente Lípiz era anarquista y tuvo participación en la I República Española. Esta familia desde su llegada a Cuba comienza a participar en las luchas por las reivindicaciones sociales y económicas, y como consecuencia de ello en 1913 el gobierno los expulsa del país por su participación en el movimiento obrero, regresando en 1918 debido a una amnistía otorgada al concluir la I Guerra Mundial.
Emilia hereda las inquietudes revolucionarias que la llevan aun siendo una artista de profesión a vincularse activamente en las luchas obreras por demandas que se desarrollan en esta etapa.
En 1932 Emilia y su familia que continuaban participando en acciones revolucionarias fueron encarcelados y posteriormente expulsados a Barcelona donde continuaron en prisión, siendo liberados meses después debido a la presión ejercida por los anarquistas, incorporándose inmediatamente a las luchas obreras que se desarrollaban en el país. Su hijo Universo Lípiz Rodríguez al referirse a sus padres recuerda con orgullo que:
Emilia, aunque era española radicada en Matanzas, el hecho de dirigir el Congreso Obrero en 1912 hace que haya dejado una huella importante en esa zona, caracterizándose por su heroísmo y dignidad.
Importancia histórica
El Congreso se había celebrado con una representación pequeña aún para la época eran más las adhesiones que las organizaciones representadas, pero, dentro de un espíritu unitario dejó un ambiente de optimismo acerca de las posibilidades del desarrollo del movimiento obrero organizado en el país.
El periodo de 1911 - 1912 quedó en Cruces como una época en la cual los anarquistas de tendencias crecientemente sindicalistas, predominaban absolutamente en el movimiento obrero de la zona, pero, sin embargo, en los dirigentes del Centro Obrero, hubo una aptitud de respeto y solidaridad hacia los socialistas.
En Cruces se observó el debilitamiento del anarquismo durante el proceso de evolución hacia la organización gremial y la búsqueda de posiciones unitarias en el Congreso Obrero de 1912.
Causas que llevaron a la no implementación de los acuerdos
En la redacción de las resoluciones aprobadas se reflejan marcadas diferencias de criterio sobre los problemas de organización. Hay que tener en cuenta que la misma corriente que prevalecía puede generar estas implicaciones por muy adelantadas que estuvieran.
La división existente en el movimiento obrero y la debilidad de los anarquistas propiciaron que surtiera efecto la campaña que arremetió el gobierno contra los participantes, logrando la pacificación en Cruces a punta de ametralladoras.
Además, se había vulnerado por el gobierno el derecho a reunión, siendo imposible continuar desarrollando los contactos necesarios para redactar las acciones a ejecutar, teniendo en cuenta que la misma sería realizada por una Federación Provisional la cual fue nombrada en las secciones del Congreso.
Trascendencia histórica
Es el resultado de un accionar sistemático de dirigentes obreros que como continuidad de lo aprobado en el Congreso Obrero de 1892 celebrado en La Habana organizaron a los obreros agrícolas e industriales hasta crear una organización que los agrupara a todos para realizar el evento que tendría como misión esencial la creación de la Federación Nacional del Trabajo, lo que demuestra la labor concatenada realizada previo a su ejecución.
Fue el primero que habló de una organización nacional, se desarrolla en una localidad fuera de la capital lo que conllevó una mayor convocatoria, mayores preparativos, aseguramientos y a su vez dio a conocer que en el centro de la isla existían condiciones para asumir la presencia de líderes obreros que confraternizaran con los pobladores quienes designaron el teatro Martí como sede, un local emblemático para su realización.
Lo sucedido quedó plasmado no solo en el Manifiesto de Cruces, sino en la prensa de la época y fue estudiado por John Domoulin para que las próximas generaciones conocieran lo acontecido. El día de realización, 24 de febrero, hace que en cada conmemoración de esta fecha patria se recuerde el Congreso Obrero de Cruces porque precisamente se selecciona, por lo que representa para los cubanos,
En 1912 se introduce la corriente feminista en Cuba, y se selecciona para presidir este cónclave a una mujer, Emilia Rodríguez de Lípiz. Reconocer el papel protagónico de la mujer en las luchas por reivindicaciones laborales entre otras, sin dudas es resaltar el aporte de las féminas a la historia del movimiento obrero y sindical cubano.
Lo acontecido los días 24 y 25 de febrero de 1912 en la localidad de Cruces, fue un evento memorable y trascendental que marca un hito en la historia del movimiento obrero y sindical de Cruces, Cienfuegos y de Cuba, porque este Congreso se realiza por sujetos con suficiente madurez y conciencia cuyo objetivo supremo era crear una organización nacional que agrupara a los trabajadores en su lucha y aunque por el contexto adverso en que se realiza ya que sus participantes fueron reprimidos, encarcelados y deportados, además de que existía división en el movimiento obrero y no se logran los objetivos propuestos, si debemos resaltar que su realización fue expresión del salto que estaba teniendo la clase obrera cubana desde los inicios del siglo XX a posiciones más sólidas en su lucha por alcanzar sus derechos.
Fuentes
- Padilla Jiménez, G. Ponencia Congreso Obrero de Cruces, 1912, un evento memorable y trascendental.
- Ríos, A. (2002). Fuego en la sangre. Vida de Universo Lípiz.
- Colectivo de autores. (s.a). Cienfuegos de 1902 a 1935, visto por la prensa local. Cienfuegos. Recuperado a partir de Archivo Histórico Provincia Cienfuegos.
- Colectivo de autores. (1992a). Historia Provincia Cienfuegos. Periodo Colonial. (Oficina de Investigaciones Históricas del PCC Provincial.). Cienfuegos.
- Colectivo de autores. (1992b). Historia Provincia Cienfuegos. Periodo Neocolonial. Cienfuegos.: Oficina de Investigaciones Históricas del PCC Provincial.
- Colectivo de autores. (2011a). Síntesis histórica Municipal Cruces. La Habana.: Editora Abril. Colección Memorias.
- Colectivo de autores. (2011b). Síntesis histórica Provincial Cienfuegos. La Habana.: Editora Historia.
- Dumoulin J. (s.a). El Movimiento Obrero en Cruces 1902-1925. Corriente ideológica y formas de organización en la industria azucarera. Las clases y las luchas de clases en la sociedad neocolonial cubana. Cruces.
- Historia del Movimiento Obrero Cubano. (1985a). (Vol. 1). La Habana.: Editora Política.
- Historia del Movimiento Obrero Cubano. (1985b). La Habana.: Editora Política.
- El Comercio (1912, febrero 22-26).
- La Correspondencia (1912, febrero 22-26)
- Libro de Esquemas. Historia del Movimiento Obrero y la Revolución Socialista. (1988). La Habana.: Imprenta Central de las FAR.
- Navarro FG. (2010, octubre 8). Segundo Congreso Obrero Nacional. Cinco de Septiembre, 3. Cienfuegos.
- Tellería Evelio. (1984). Los Congresos Obreros en Cuba. La Habana.: Editorial Ciencias Sociales.
- Rovira González V. (s.a). El Movimiento Obrero en Cienfuegos. 1935-1947.
